COLEGIO EL CORAZÓN DE JESÚS SEVILLA, DE LAS MISIONERAS HIJAS DEL CORAZÓN DE JESÚS
El centro concertado de Educación Infantil, que reconoce y declara su confesionalidad como “Centro cristiano” dentro de la misión de la Iglesia católica.
Nuestro colegio El Corazón de Jesús, lleva realizando una importante labor educativa desde los inicios del barrio sevillano del Parque Alcosa, actualmente dedicado a la enseñanza de la etapa de infantil en su segundo ciclo bajo la dirección marcada por la entidad titular Misioneras Hijas del Corazón de Jesús.
El colegio concertado El Corazón de Jesús cuenta con una línea de educación infantil en la cual se desarrolla una metodología activa y participativa, y se promueve el aprendizaje globalizador de las diversas áreas marcadas en el currículum de esta etapa, en un clima seguro y afectivamente positivo donde nuestros alumnos y alumnas puedan desarrollarse con confianza y autonomía.
Educación Infantil. Finalidades Educativas
- Identificar y plantear interrogantes y problemas a partir de la experiencia diaria utilizando tanto los conocimientos y los recursos materiales disponibles como la colaboración de los recursos humanos necesarios para resolverlos de forma creativa, haciendo del mensaje cristiano una manera de entender y de vivir.
- Apreciar la importancia de los valores básicos de la vida y la convivencia y obrar de acuerdo con ellos, teniendo como modelo a Jesucristo, Dios, hecho hombre.
- Colaborar para crear un clima afectivo y positivo de trabajo, aprendizaje y colaboración entre toda la comunidad educativa de nuestro colegio.
- Ayudar a nuestros alumnos a valerse por sí mismos en las tareas cotidianas, tanto escolares como de su entorno más próximo, adquiriendo progresivamente confianza en sus propias actitudes, y desarrollando capacidades de autoevaluación y cuidando la formación de una escala de valores positiva que sea la guía de su conducta.
- Comprender y establecer relaciones entre hechos y fenómenos del entorno natural y social, contribuyendo activamente a fomentar el respeto, amor y cuidado de dicho entorno, y por consiguiente del centro, para conseguir así la mejora y el disfrute colectivo del entorno natural más inmediato, considerándolo como don de Dios y tarea permanente del hombre.